Imagen: Ginebra, Diciembre 2008. Son las tres de la mañana y a su casa está volviendo.
No tuvo ganas de quedarse con Nadine toda la noche, otra vez no.
Vuelve a su departamento y descubre que en algún lugar sus llaves dejó.
No le queda otra que regresar a la casa de su chica a buscarlas.
El mal humor de Ella al abrir la puerta se refleja en su cara.
“Je suis desolé” , Simon intenta excursarse sin mucho éxito.
Vuelve a su lugar y llama a un cerrajero, el chiste le quitó el sueño.
A la mañana, casi sin haber dormido, se va a la oficina.
Cuando está estacionando toca el auto de al lado.
No tuvo ganas de quedarse con Nadine toda la noche, otra vez no.
Vuelve a su departamento y descubre que en algún lugar sus llaves dejó.
No le queda otra que regresar a la casa de su chica a buscarlas.
El mal humor de Ella al abrir la puerta se refleja en su cara.
“Je suis desolé” , Simon intenta excursarse sin mucho éxito.
Vuelve a su lugar y llama a un cerrajero, el chiste le quitó el sueño.
A la mañana, casi sin haber dormido, se va a la oficina.
Cuando está estacionando toca el auto de al lado.
El dueño del vehículo lo increpa.
“Je suis desolé” Simon contesta.
A media mañana su jefe le baja línea.
“Je suis desolé” Simon contesta.
A media mañana su jefe le baja línea.
La presentación en la que estuvo trabajando no llena las expectativas de aquél hombre.
“ Je suis desolé” Simon responde.
En la cafetería a la hora del almuerzo vuelca, por accidente, el jugo de naranja a una mujer con la que choca.
“Je suis desolé” Simon se disculpa.
Volviendo a su casa pasa por el Supermercado.
“ Je suis desolé” Simon responde.
En la cafetería a la hora del almuerzo vuelca, por accidente, el jugo de naranja a una mujer con la que choca.
“Je suis desolé” Simon se disculpa.
Volviendo a su casa pasa por el Supermercado.
Intenta hacerse de unas cajas de sopa y con el codo tira las latas de arvejas expuestas a lado.
El empleado del lugar lo mira desconcertado ante tal muestra de torpeza,
“Je suis desolé” explica Simon.
Descalzo y en boxer da cuenta de la cena mientras mira unos capítulos viejos de Miami Vice.
Su novia lo llama al móvil, que dónde estás?.
Simon olvidó la cita hecha con ella hace dos semanas,
“Je suis desolé” Simon proclama.
Se va a dormir sintiéndose vacío.
El empleado del lugar lo mira desconcertado ante tal muestra de torpeza,
“Je suis desolé” explica Simon.
Descalzo y en boxer da cuenta de la cena mientras mira unos capítulos viejos de Miami Vice.
Su novia lo llama al móvil, que dónde estás?.
Simon olvidó la cita hecha con ella hace dos semanas,
“Je suis desolé” Simon proclama.
Se va a dormir sintiéndose vacío.
Estuvo todo el día dando disculpas a todo el mundo.
Tiene la sensación de haberse olvidado de sí mismo, en algún rincón.
“Je suis desolé” se dice a sí mismo, como un mantra, hasta quedarse dormido.
Tiene la sensación de haberse olvidado de sí mismo, en algún rincón.
“Je suis desolé” se dice a sí mismo, como un mantra, hasta quedarse dormido.
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No se si es un tema de género, pero Simon es mi preferido. Este cuento genial! Paula´s Decke, a por más Simon, aguante y a más "je ne suis desolé".
ResponderEliminarConozco muy bien esa situacion. Se da mucho en dicienbre/enero y los inviernos de Ginebra, como los de muchas ciudades europeas, dejan que decear... Hagamos una colecta para mandar a Simon a Buenos Aires. Renovacion y cambio.
ResponderEliminarTenemos que hacer algo con la autoestima de Simon...no se puede andar por la vida con ese sentimiento de desolacion...lo de Simon es interno...es visceral...las llaves, el toque al auto, el fracaso en su proyecto,el jugo de naranja, las latas...todos intentos para comunicar al mundo...que..."Je suis desole"...
ResponderEliminarSe ve que los "Cocotte" de su madre dejaron fuerte lastre...pero ya encontrara una mujer ante la cual olvide los "Cocotte"de su madre y se sienta por primera vez un hombre sin dudas...que saque de su interior todos los hombres guardados que tiene y que le permita decir su nuevo mantra:"Je ne suis desole...Je ne suis desole"
Paula me gusto mucho el relato de Simon...estoy ansiosa por contarme entre las primeras que lee tus cuentos...ahora me tengo que contentar con ser de las ultimas por estas 5 hras de diferencia...pero...a partir del lunes...!!!los voy a leer 5 horas antes!!!!
ResponderEliminarClau, ya sabemos de que hablamos, tres de la tarde y la luz encendida, si se puede, una lluvia finita, de las que duran varios días ininterrumpidos y si en algún momento hay viento, mejor.
ResponderEliminarOma, cuanta expectación! que lindo, ya nos veremos a la brevedad!